5 estrategias clave que debes seguir para vencer el miedo al amor

No hay nada como la felicidad que nos genera el estar enamorados, pero también es verdad que a veces el amor nos produce vértigo. Muchas veces nuestras emociones se ven influenciadas por las experiencias del pasado. Suponen una mochila de la que no somos conscientes hasta que aparece un nuevo amor y es en este momento cuando somos conscientes de lo difícil que es vencer los miedos y dejarse llevar de nuevo. Entonces somos capaces incluso de sabotearnos a nosotros mismos por culpa de ese trauma así que es importante conocer las diferentes estrategias para hacer frente a este miedo al amor para que realmente podamos disfrutar de él.

1- Una mirada atrás

Sí, mirar hacia el pasado es clave para superar el miedo al amor. Ahora que has superado la ruptura, es el momento de analizar qué falló en aquella relación, por qué salió mal, qué problemas se repetían una y otra y otra vez. Seguro que pronto encuentras patrones o dinámicas negativas que se han repetido en tus relaciones anteriores, y que pueden haber provocado el miedo a enfrentarse de nuevo a una relación, es decir miedo a enamorarse otra vez. Pero no te quedes ahí, viaja todavía más atrás en el tiempo, hasta que eras niño: esos comportamientos y las actitudes que presenciaste entonces dictaminan cómo eres ahora.

2- La vulnerabilidad no es mala

Tendemos a considerar la vulnerabilidad como una debilidad, y parte de nuestro miedo al amor puede venir por ahí. Este temor nos hará actuar a la defensiva en todo momento, dificultando el buen desarrollo de la relación. Deberías bajar tus defensas y mostrarte algo vulnerable ante tu nueva pareja. Solo así evitarás mostrarte ante ella de una forma poco precisa o ideal. El simple hecho de mostrarse vulnerable asusta a mucha gente, pero es esencial si te quieres sentir cómodo en el amor y quitarte la mochila del miedo.

3- Habla de tus medios

Otro error muy habitual es quedarnos esos miedos para nosotros mismos. Es importante tanto saber cómo gestionar las emociones como hablar con alguien sobre esos miedos que sientes. Puede ser tu propia pareja, lo que reforzará vuestra relación, pero hay que saber manejar los tiempos. Lo ideal es hablar del miedo al amor con tu pareja cuando ambos estéis bien, no hacerlo en caliente después de una discusión, o incluso como argumento en esta discusión, ya que seguramente tenga el efecto contrario. Esto está relacionado con esa vulnerabilidad de la que hablábamos antes, aunque si no te sientes seguro siempre puedes compartir tus inquietudes con tu mejor amigo.

4- Ignora las voces de tu cabeza

Si tienes miedo al amor es fácil que en tus cabeza se repitan pensamientos negativos como “no te quiere”, “te va a hacer daño”, “te está manipulando”, “no puedes confiar en nadie que no seas tú”... e incluso pensamientos propios de una persona con baja autoestima, como “es demasiado para ti”. Todas estas voces no hacen más que acentuar tu miedo al amor, pero dejar atrás esos pensamientos tan negativos es imprescindible para superar ese miedo al amor. Quizá al principio te produzca ansiedad, pero pronto notarás una mejora en vuestra relación.

5- Acepta tus sentimientos

Nuestra última estrategia es muy simple: uno no puede elegir de quién se enamora, lo bonito del amor es que es totalmente impredecible, y por mucho miedo al amor que tengas tarde o temprano tendrás que acabar aceptando tus sentimientos. El hecho de intentar impermeabilizarte ante el dolor que te produce el recuerdo de situaciones del pasado también te impedirá disfrutar plenamente del nuevo amor o de la felicidad, así que abre tu corazón a todo tipo de emociones. No solo las vivirás de manera más intensa, también mejorará tu relación.

Como ves, aunque se trata de cinco estrategias distintas para superar el miedo al amor, podemos combinar varias de ellas para dejar atrás este miedo al amor. Es algo que debes superar junto a tu pareja, y que no se resolverá de un día para otro sino que requiere un proceso de maduración. Por eso también puedes solicitar atención psicológica o buscar un consejero si lo consideras oportuno.