La amistad: la mejor fuente de felicidad

Dicen que quien tiene un amigo tiene un tesoro, pero la amistad es mucho más. Una amistad es una enorme fuente de felicidad, probablemente la mejor. En ella, algunas emociones positivas como la alegría siempre son mejores cuando se pueden compartir con alguien que realmente nos importa; pero no solo eso. La amistad una de las emociones más beneficiosas que existen, y para demostrarlo aquí tienes una muestra de los muchos beneficios que nos proporciona la amistad, la mejor fuente de alegría y felicidad que existe.

Amistad contra la soledad

Aunque de vez en cuando todos necesitemos nuestro espacio propio, sin nadie alrededor que nos moleste, la soledad es tristeza y la compañía es alegría. Una amistad verdadera nos ayuda a llenar los espacios de soledad, y del equilibrio entre esos momentos de soledad y la amistad aparece el equilibrio que le da sentido a nuestra vida. Además, la amistad hace que nos sintamos parte de un grupo, una tribu, y esas relaciones con el resto tienen magníficas consecuencias para nuestro bienestar físico y emocional.

De hecho, la sensación de pertenecer al grupo es un estímulo más que nos ayuda a motivarnos a la hora de enfrentarnos a los retos que nos propone la vida. El hecho de relacionarnos con la gente nos permite descubrir que el resto también tienen problemas, en ocasiones más difíciles que los propios; pero también suponen una ayuda a la hora de superar los momentos duros. Y no solo esto, también nos ayudan a aceptarnos a nosotros mismos, con nuestras virtudes y defectos. Una buena amistad es lo mejor que le puede pasar a tu autoestima y en definitiva, lo mejor que te puede pasar en la vida.

La amistad es salud

Más allá de alegría, la amistad es salud. De hecho, uno de los efectos de ser felices es que nuestro cuerpo es más resistente a ciertos problemas y enfermedades, por lo que viviremos más años. Se ha demostrado que el apoyo de nuestros amigos es clave a la hora de hacer frente a ciertas enfermedades, reduce los efectos de otras como la depresión y nos ayuda a prevenir enfermedades tan graves como la demencia. Pero no hace falta ponerse en los casos más graves, hasta las opciones de coger un resfriado son menores si tenemos buenos amigos a nuestro alrededor. Además, en esos momentos en los que te sientes más decaído o que has comenzado a dejar de creer en ti, ese buen amigo también sabrá dotarte de buenas claves para que tu autoestima sea alta, por lo que también nos ayudará en esa parte psicológica que muchas veces no se ve. ¿Qué más se puede pedir?

Y, como decíamos antes, la amistad también nos da la felicidad de vivir. Hay estudios en los que se demuestra que ese miedo a ser juzgado por los demás no existe cuando tienes a un buen amigo a tu alrededor. Como consecuencia, dichos estudios se reafirman en que el apoyo social es una de las claves para prolongar la esperanza de vida. La razón es que la presencia de amigos influye de manera positiva en nuestros hábitos diarios, de forma que sea más fácil seguir viviendo. No podemos pasar por alto la función tranquilizante de nuestras amistades, ya que una conversación o un rato con uno de nuestros mejores amigos nos ayudan a aliviar el estrés.

Tus amigos, tus mejores psicólogos

A veces estamos tan convencidos de lo que hacemos que somos incapaces de ver que no nos hace felices o que estamos equivocados. Sin embargo, el hecho de tener un amigo a nuestra vera ayuda a descubrir qué hacemos mal y qué hacemos bien, y nos servirá para volver al buen camino.Algo parecido pasa en el trabajo. El hecho de tener buenos amigos en el trabajo nos hará rendir más y ser más felices en nuestro trabajo, así que trata de cultivar buenas amistades en el trabajo. Como consejo, asegúrate de que tratas como es debido a tu gran amigo, porque si os lo proponéis, podréis llegar alto. Evita comportamientos egocentristas y muestra tu apego, porque si recaes en dichos errores que muchas personas comenten en sus relaciones sociales, lo perderás.

Y es que más allá de compartir confidencias y momentos, los amigos son realmente un tesoro y estar junto a ellos nos ayuda a ser más felices. Pero no solo los amigos de toda la vida provocan esta sensación, el hecho de crear nuevos amigos también es una interesante fuente de felicidad así que si quieres ser feliz procura conservar todas tus amistades, sin olvidar la creación de nuevos amigos.