Lo que debes saber sobre las dinámicas de autoestima y sus beneficios

Uno de los problemas más habituales hoy en día es la falta de autoestima. A las personas nos cuesta mucho gestionar nuestras virtudes y nuestros defectos, y eso puede llevarnos a situaciones de lo más desagradables. Cuando nos convertimos en una persona con autoestima baja nos sentimos decaídos y carentes. Por fortuna, existen varias técnicas que pueden ayudarnos a revertir esta situación y uno de los mejores ejemplos son las dinámicas de autoestima, unos ejercicios que nos ayudan a trabajar la autoestima de forma afectiva para salir fortalecidos de estas circunstancias.

Desde que Daniel Goleman nos enseñó la importancia de la inteligencia emocional, hemos comprobado que trabajar la inteligencia emocional es muy bueno para trabajar las percepciones que tenemos sobre nosotros mismos y en cierto modo también es bueno para reconocer nuestras emociones y nuestros sentimientos, de modo que esta combinación entre inteligencia emocional y autoestima puede ayudarnos a manejarnos en aquellos contextos que son más difíciles de interpretar para nosotros mismos. Este es el fundamento de las dinámicas de autoestima, el de proporcionarnos buenos ejercicios para trabajar la confianza que tenemos en nosotros mismos y en definitiva, para sentirnos bien con lo que hacemos.

¿Qué son las dinámicas de autoestima y qué beneficios tienen?

Las dinámicas de autoestima son un conjunto de juegos pensados para fortalecer nuestro desarrollo personal, por lo que su objetivo es no solamente enseñarnos lo importante que es el amor propio como seres individuales, sino trabajar las inseguridades, nuestras virtudes, nuestra motivación. Por ello, estos juegos de autoestima nos ayudan a saber quiénes somos en realidad, cuál es nuestra esencia, nuestros puntos débiles y nuestros puntos fuertes, porque todo ello forma parte de lo que somos como personas.

Son varios los beneficios que tienen las dinámicas de autoestima, especialmente en la medida que nos ayudan a aprender del día a día y a crecer como personas. Entre todos estos beneficios, destacamos los siguientes:

• Las dinámicas de autoestima nos permiten ver cuáles son las cualidades, tanto de los demás, como de nosotros mismos. Esto es una forma de aprender a premiar lo que hacen los demás, pero también lo que nosotros mismos hacemos. En este sentido, las dinámicas de autoestima fomentan las relaciones entre las personas.
• Si bien las dinámicas de autoestima abren la puerta a las reflexiones sobre nosotros mismos, ponen una barrera a las críticas, nos ayudan a poner freno a esos momento en los que no paramos de juzgar lo que hacemos y entramos en un bucle sin salida.

Ejemplos de dinámicas para mejorar la autoestima

A continuación vamos a descubrir 3 dinámicas de autoestima que pueden servirnos a todos, tanto si somos más pequeños, como si somos más mayores, ya que nos ayudarán a ser más empáticos con nosotros mismos y con los demás.

Busca un momento para ti

En los tiempos que corren vamos tan deprisa que apenas tenemos tiempo para nosotros mismos. El trabajo, las responsabilidades, la familia... todo va antes que nosotros, y eso nos hace, a veces, dejarnos de lado. De este modo, tener un momento de paz para conectar con nosotros mismos, para leer un poco, ver una película o simplemente darnos un baño relajante, nos ayudará a querernos más, ya que nos estamos cuidando más.

Sonríe al espejo

Parece increíble, pero para muchas personas, mirarse al espejo es un auténtico suplicio. Aprender a pasar tiempo con nosotros mismos puede hacer que consigas caerte mejor. Por ello, pararse frente al espejo y hablar con él, dedicarnos unas palabras amables y sobre todo sonreír. Encontrarte contigo cada día en el espejo puede ser muy beneficioso, pero tienes que tener paciencia.

Piensa en tus cosas buenas

Hoy en día estamos muy preocupados en todos nuestros defectos. Observamos con claridad todo lo que hacemos mal, pero no somos capaces de reconocer lo que hacemos bien. Nos han enseñado que señalar nuestras virtudes es de poco humildes y eso nos lleva a querernos menos. Un ejercicio de autoestima que puede ser muy revelador es hacer una lista de todas las cosas que te gustan de ti... piensa un poco y verás cómo te sorprendes.