Todo lo que los celos arrebatarán de tu vida

Los celos no son más que el temor a perder algo que ya tenemos. Lo habitual es desarrollar los celos hacia otra persona, por ejemplo los celos con la pareja, pero también se pueden manifestar por el temor a perder el trabajo o bienes físicos. El ser humano siente celos por naturaleza, pero los celos son uno de esos sentimientos tan fuertes que si somos incapaces de controlarlos nos acaban anulando como personas. Y eso puede hacer que acabemos perdiendo las cosas más importantes de nuestra vida, incluida esa persona que tanto miedo nos daba perder.

Efectos de los celos en tus relaciones

Más allá de los sentimientos mutuos la clave del éxito de una relación es la confianza, el pilar sobre el que se sostiene esa relación. Sin embargo, la aparición de los celos implica una pérdida de confianza que acabará afectando negativamente tu relación, ya sea de pareja, amistad, etc. Por mucho que la convención social diga que los celos son una demostración de amor, pueden ser una forma más de maltrato psicológico hacia tu pareja, llegando incluso a manifestarse de forma violenta.

Las personas que sienten celos adoptarán una actitud alerta, investigando a su pareja, lo que aumentará la tensión entre ambos y perjudicará la convivencia. La pareja se sentirá acosada, vigilada y víctima de unos interrogatorios que no tienen motivo aparente. El celoso no hará el esfuerzo de preguntar directamente por la razón de sus celos, sino que tratará de buscar pistas y construir un escenario -real o no- lo que no hará más que echar más leña al fuego de la tensión en la relación. Llega un punto en que prácticamente es imposible superar los celos en la pareja debido a que estos celos han pasado a ser celos patológicos, y ahí hablamos de celotipia.

La celotipia

La celotipia es propia de las personas inseguras, personas con baja autoestima, personas desconfiadas, o también las personas narcisistas o egocéntricos tienen más tendencia al desarrollo de los celos que el resto de personas. Y cuando esos celos son intensos y continuos nos encontramos ante la celotipia, unos celos obsesivos que se manifiestan de forma compulsiva. Sigues una especie de ritual a la hora de comprobar qué ha hecho la otra persona, siempre con las mismas pautas; hasta el punto de generar delirios. Y, como suele pasar en estos casos, el celoso no es consciente de este problema.

Pero quizá lo peor no sea esa falta de consciencia, sino que a partir de un indicio que podría ser real -o tener cierta lógica o veracidad- el celoso desarrolla en su cabeza una serie de indicios sin una base real sobre la infidelidad de esa personas a la que teme perder. Esa estructura psicológica imaginaria puede durar toda la vida; y los celos compulsivos, exagerados y enfermizos nos pueden llevar a sufrir problemas psicóticos.

Efectos de los celos sobre tu salud

Además de tu salud psicológica, tu salud física también se verá afectada por los celos. El dolor, la ira, la rabia, la envidia, el miedo, la tristeza o la pena son sentimientos y emociones que aparecen a la vez que los celos, y con ellos se manifiestan el estrés y un envejecimiento de nuestro cuerpo a un ritmo mayor de lo habitual fruto de la tensión y la ansiedad que sentimos. También entre otras de las consecuencias de padecer celos es que éstos nos pueden causar problemas para respirar, taquicardias, temblor en las manos o problemas y trastornos en nuestros sueños bastante significativos.

Tu salud cardíaca también se resentirá, y es fácil que aparezcan dolores en los hombros o en la parte superior de la espalda asociados precisamente a los celos. Por eso es importante acabar con los celos antes de que ellos acaben contigo, o de que puedas hacer algo que te pueda arrebatar a esa persona que tanto miedo te daba perder. A veces la mejor solución es acudir a un especialista en busca de ayuda para poder domar los celos.