Los 4 signos que evidencian la personalidad de una mente ansiosa

La ansiedad es una emoción que, si se experimenta a baja intensidad, puede llegar a tener efectos beneficiosos, pues permite a una persona aumentar la atención y la motivación sobre lo que está haciendo, por lo que facilita un mejor desempeño de ciertas actividades. Sin embargo, cuando la ansiedad que experimenta una persona alcanza un nivel alto, el efecto que se genera es justamente el contrario, ya que ésta puede generar un deterioro permanente y desencadenar, incluso, en una situación de malestar general que nos impide anímicamente continuar nuestro día a día con normalidad.

Las personas ansiosas o con tendencia a experimentar la ansiedad pueden sufrir por ejemplo fobias específicas, problemas de insomnio, estados de ánimo variados etc. Son varios los síntomas que presenta la ansiedad y que han sido confirmados por los psicólogos pero en función de cada persona se puede manifestar los síntomas de una forma particular, y puede sufrir los efectos de la ansiedad de una forma diferente.

¿Cómo identificar a una personalidad ansiosa?

Músculos tensos, insomnio, dolor de estómago, migrañas, excesivas preocupaciones...Estos son los síntomas generales que la ansiedad puede provocar en cualquier persona que padezca este tipo de trastorno psicológico. Sin embargo, hay que saber diferenciar el hecho de pasar por un episodio de ansiedad concreto alguna vez en la vida, con el hecho de tener una personalidad ansiosa, pues ambas circunstancias no son lo mismo.

Uno de los principales rasgos que definen a las personas ansiosas, es que éstas tienen que lidiar día tras día con pensamientos negativos que se acaban convirtiendo en auténticas preocupaciones. Además, en la mayoría de los casos, gran parte de estos pensamientos pueden ser infundados por uno mismo. La mente de una persona ansiosa es un ir y venir constante de pensamientos negativos y estresantes. Algunos de éstos pensamientos, los más típicos de la personalidad ansiosa son:

El temor a que las cosas les salgan mal

Las personas con este tipo de personalidad suelen tener un temor declarado a que las cosas que hacen no les salgan bien. Y por ello, una persona ansiosa siempre evalúa al detalle las consecuencias que puede tener cada uno de sus actos. Son personas que viven con el miedo constante a que algo les ocurra y que, ese algo, interrumpa por completo su vida y trunque su felicidad.

Miedo a olvidarse de las cosas importantes

Pero las personas ansiosas también tienen pavor al hecho de olvidarse de todas aquellas cosas que consideran importantes. Por ello, es normal que este tipo de personas tenga la necesidad de mirar dos o tres veces dentro del bolso por si se han olvidado las llaves de casa dentro, o que vuelvan a casa para comprobar que han apagado todas las luces.

Necesidad de controlar lo que les pasará en el futuro

Las personas con personalidad ansiosa no suelen pararse a pensar mucho en el pasado, ni siquiera son muy conscientes del presente, porque lo que realmente les preocupa es lo que les pasará en el futuro. Este tipo de personalidad se preocupa, y mucho, por las cosas que le puedan suceder en los próximos momentos, es decir, en el futuro más inmediato. Esa necesidad de tenerlo todo bajo control es lo que aumenta el estrés sufrido.

La ansiedad por el hecho de estar ansioso

Este tipo de pensamiento puede sonar paradójico, pero se trata de un pensamiento muy recurrente en la mentalidad de una persona ansiosa y se produce, especialmente, en la mente de aquellas personas que son conscientes de que tienen una personalidad ansiosa. Y es que, aunque las personas ansiosas sepan que no tienen ninguna razón aparente para estar preocupadas porque en su vida todo fluye con normalidad, lo cierto es que no son capaces de bajar la guardia y se empeñan en vivir en una alerta permanente. Y este círculo vicioso de la ansiedad es lo que no les permite, precisamente, ponerse el objetivo de superarla.