La piedra del ámbar está formada por resina de árbol solidificada y fosilizada, siendo así una de las pocas piedras energéticas que no está formada por cristales. El ámbar es una piedra protectora que vincula nuestro yo de cada día con la realidad espiritual superior.
El ámbar promueve el altruismo y, entre los significados de las piedras, ésta destaca por su fuerte vinculación a la sabiduría. Además, el ámbar tienen importantes propiedades espirituales que transforman la energía negativa negativa en positiva.
Esta es la pregunta que todos nos hemos hecho alguna vez: no es una piedra al uso, es una resina fósil de gran transparencia y brillo. Se forma a partir de restos de resinas de árboles coníferos de hace millones de años. Para que la resina se convierta en ámbar tienen que pasar 10 millones de años. La región báltica es donde podemos encontrar mayor deposito y calidad de estas resinas fosilizadas.
El Ámbar está clasificada como gema orgánica, en esta clasificación se encuentran todas las piedras preciosas creadas o derivadas de organismos vivos.
El ámbar destaca por sus intensas conexiones con la tierra, lo que hace que sea una piedra que asienta las energías superiores. Es una poderosa piedra sanadora y limpiadora que aleja las enfermedades del cuerpo y favorece la revitalización de los tejidos. Además, limpia el entorno y los chacras, absorbe las energías negativas y las trasmuta en fuerzas positivas que estimulan la autosanación corporal.
Respecto a la psicología, el ámbar no solo aporta estabilidad a la vida, también motiva favoreciendo el impulso de deseo para conseguir nuestros objetivos. Sus cálidas y brillantes energías se traducen en una actitud solar y espontánea, pero que respeta la tradición.
Mentalmente, esta piedra energética estimula el intelecto, despeja la depresión y favorece un estado mental positivo, además de la expresión creativa. Aporta equilibrio y paciencia, y favorece la toma de decisiones, siendo de ayuda para la memoria. A nivel emocional, el ámbar favorece la paz y desarrolla la confianza.
El ámbar es un poderoso limpiador y sanador de los chacras. A nivel físico, imbuye el cuerpo de vitalidad y tiene el poder de expulsar la enfermedad corporal. Absorbe el dolor y la energía negativa, el ámbar permite al cuerpo reequilibrarse y curarse; también alivia el estrés.
Esta piedra energética resuena con la garganta, tratando los problemas sus problemas. El ámbar absorbe el dolor y alivia el estrés. También trata el estómago, el bazo, los riñones, la vejiga, el hígado y vesícula biliar, alivia los problemas de articulaciones y fortalece las membranas mucosas.
Lleva puesta la piedra del ámbar durante largos periodos, especialmente en la muñeca o garganta. Si vas a tratar bebés o niños, es conveniente que primero lleve la piedra puesta la madre.
También se puede utilizar en forma de elixir, tanto para curar heridas como para usarlo en forma de antibiótico natural.
Resina opaca o transparente. Podemos encontrar ámbares con insectos o vegetación atrapados dentro y pueden ser de diversos tamaños.
Piedras de color Dorado-amarilloPiedras de color marrónPara conseguir los máximos beneficios de esta piedra energética, puedes combinar el ámbar con esmeralda, rubí o diamante.
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