Cómo puede una relación abierta funcionar

Relaciones abiertas: cuando la falta de compromiso funciona

El mundo de las relaciones de pareja es tremendamente complejo, y mientras algunos ven la base de sus relaciones en la fidelidad y el compromiso, otros son capaces de mantener relaciones abiertas. No quiere decir que sean relaciones inferiores o superiores a las relaciones cerradas tradicionales, ni mejores o peores. Una relación sentimental abierta es algo diferente, donde la confianza en tu pareja juega un papel fundamental pero donde la puerta a los encuentros con otras personas no están cerradas.

Qué es una relación abierta

Swingers, parejas liberales, intercambios de parejas... da igual cómo les llamemos, las relaciones abiertas son aquellas en las que ambos miembros de la pareja acuerdan poder tener relaciones sexuales fuera de la pareja. Obviamente no hace falta ningún acuerdo explícito o escrito, es algo que surge igual que llegados a un punto en el inicio de la relación esta se puede convertir en exclusiva. Dicho de otra manera, si se dan las circunstancias de mantener una aventura no hay problema, pero es importante recalcar que ese derecho lo tienen las dos partes de la pareja.

Las relaciones de pareja liberales

Roman Samborskyi || Shutterstock

Hay muchas razones por las que podemos iniciar una relación sentimental abierta con nuestra pareja. Una de ellas puede ser la distancia, pero también puede ser que nos demos cuenta de que no es capaz de satisfacernos sexualmente aunque sí que nos llenen emocionalmente, que sea una vía de escape a nuestros problemas personales o de pareja, que queramos experimentar... También puede ser que el matrimonio sea más por conveniencia económica o social que por amor, y una relación abierta ayuda a mantenerlo. Los ejemplos son muchos.

Pros y contras de las relaciones abiertas

Como en cualquier relación de pareja, la decisión de mantener una relación abierta tiene ventajas y desventajas. A favor juegan la sensación de satisfacer nuestra libertad, de afrontar desafíos o la desaparición de los celos. Relacionado con los celos, también se pierde la tensión de dudar sobre la aparición de una tercera persona que acabe llevándose a nuestra pareja. Puede ser una forma de revitalizar relaciones que, con el paso del tiempo, se han ido desgastando y están algo estancadas. Eso sí, no todas las personas tienen las mismas facilidades para superar los celos en la pareja y hacer como si nada hubiera pasado.


Ventajas de las relaciones abiertas

Forewer || Shutterstock

Pero este tipo de relaciones también tienen sus desventajas. Ya hemos dicho que debe ser abierta por los dos lados, o no es una relación abierta sino una cosa muy diferente. Entrar en detalles puede ser algo peligroso, así que una regla debería ser no hablar de ellos, o dar lugar a una competición con tu pareja a ver quién se acuesta con más personas. Y eso se convierte en otro peligro: caer en la rutina y que mantener relaciones cambiando con tanta frecuencia de pareja llegue a un punto en que nos resulte aburrido.

La tercera persona

A la hora de conseguir que una relación abierta funcione es muy importante diferenciar la parte sentimental de la relación de la parte sexual, y tener claro que nuestra prioridad siempre debería ser nuestra pareja. Se debe tener cuidado en este sentido, pues de lo contrario el sentimiento de culpa puede aparecer como resultado de las acciones personales. Una de las claves a la hora de afrontar ese reto es si la tercera persona será alguien conocido o alguien a quien no conozcamos de nada. Es una cuestión que incumbe a la pareja, pero el hecho de que sea una persona conocida puede hacer que esa tercera persona -o incluso tú- os involucréis emocionalmente y acabe vuestra relación de amistad.

La clave de las relaciones de pareja sin compromiso

sivilla|| Shutterstock

Por último conviene destacar que para que nuestra relación abierta sea exitosa ambos debemos ser muy fuertes psicológicamente para evitar la aparición de los celos o el desarrollo de dependencias emocionales hacia esa tercera persona.

Y si veis que la cosa no funciona siempre podéis poner fin a la relación abierta, ya sea para dar paso a una relación cerrada o para concluir definitivamente una relación de pareja que tiene malas perspectivas de futuro.

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Pau Sisternas

Graduado en Periodismo y comunicación por la Universitat de València. Postgrado en formación del profesorado de Español como Lengua Extranjera. Periodista, blogger, community manager, apasionado del deporte y atleta en mi tiempo libre. De Valencia, intento vivir de lo que más me gusta escribiendo en blogs. Aficionado a cualquier deporte, adicto a las series, creo que las películas se disfrutan más con palomitas. Aunque suene a tópico, a mi también me gusta leer, viajar y la buena comida.

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