En la vida todos buscamos la felicidad, y aunque lo hacemos de forma constante, muchas veces no damos con la manera adecuada. Si bien es cierto que se trata de una búsqueda constante, lo que también es verdad es que no podemos esperar a que la suerte llegue a nuestra casa. La vida es complicada y a todos nos pasan cosas buenas y malas, saber encajarlas es la base de la felicidad y también, de la filosofía zen. Y te preguntarás, ¿qué es la filosofía zen y para qué sirve? ¿Cuáles son los principios de la vida zen? ¿Cómo nos puede ayudar esta rama de la meditación en nuestro día a día? Si quieres conocer la respuesta, ¡sigue leyendo!
Cómo seguir la filosofía zen para vivir plenamente
Existen numerosos motivos y circunstancias que pueden dolernos y hacer que nuestra vida nos parezca un lamento. Sin embargo, los principales enemigos de nuestra felicidad son aquellos grilletes que nos ponemos en nuestra mente, y las circunstancias que nos generan ansiedad, el estrés o la frustración. Aprender a integrarlos en tu vida de la mejor manera te ayudará a estar más cerca de la filosofía zen y también más cerca de ti mismo. Por eso, hoy te contamos cuáles son los principios de la filosofía zen para que no dudes ni un segundo en ponerlos en práctica.
Una vida tranquila
Se trata de algo que todos deberíamos poner más en práctica, sobre todo en los tiempos que corren. Hoy en día estamos preparados para no llegar a ningún sitio. Nos agobiamos con el trabajo, la familia, los niños y apenas tenemos tiempo para nosotros mismos y menos aún para reflexionar sobre lo que queremos.
Por eso la filosofíazen es justo lo que necesitamos para vivir el presente y disfrutar de cada cosa que hacemos, aprovechando el valor que tienen las pequeñas cosas para construir nuestra felicidad. Gracias a esta filosofía encontraremos el modo de mantener nuestra cabeza en quietud, y todo esto se traducirá en una vida plena y sosegada en la que reine la paz interior.
Vive el aquí y ahora
Pensar demasiado en el pasado no es nada bueno, y es que, vivir en un tiempo que ya no está puede causarnos algunos trastornos del estado de ánimo como depresión, por el recuerdo de algo que ya no está o por cómo hicimos algo mal. Del mismo modo, pensar siempre en el futuro también nos aleja de disfrutar de lo que estamos haciendo ahora, y nos puede llevar a un estado de ansiedad crónico. Por este motivo, la segunda regla de la filosofía zen es aprender a vivir el aquí y el ahora, para así tomar más conciencia de lo que hacemos. ¿Cómo podemos seguir este principio zen? Sencillo, meditar con atención plena y mindfulness para estar presentes en lo que hacemos.
Aprende a soltar
El apego que tenemos a ciertas cosas nos impide avanzar en la vida, sobre todo si se trata de cosas que nos hacen daño. Sabemos que es muy complicado lograr el desapego, pero el primer paso es ser conscientes de que llevamos cargas que nos impiden avanzar en nuestros objetivos. La filosofía zen hace hincapié en que debemos dejar ir y soltar todo aquello que nos hace daño. Ciertamente el desapego emocional tiene grandes beneficios y en este punto dejaremos de sufrir.
Tú eres responsable de ti mismo
Asumir las consecuencias de lo que haces y también de las cosas que te toca vivir, es fundamental para alcanzar una vida plena. Por eso, la filosofía zen te dice que cuidarte a ti mismo es responsabilidad tuya y de nadie más. No podemos culpar a la suerte, al mundo o a las demás personas de nuestras desgracias. Pero lo que sí podemos hacer es cultivar nuestro amor propio y ser los dueños de nuestro destino.
Sé honesto
La honestidad es otro de los principios básicos de la filosofía zen, algo que, si lo piensas, tiene mucho sentido. No se trata solo de ser honesto con los demás, sino que hay que empezar por uno mismo. Gracias a ser fieles a nosotros mismos, a nuestros principios y valores, podremos tener mejores relaciones con los demás y con nosotros mismos.