Cuando hablamos del ego podemos pensar que se trata de algo bueno, como un sinónimo de autoestima, pero no puede estar más lejos una acepción de otra. De hecho, el ego es una falsa ilusión de nosotros mismos. El ego nos hace arrogantes, por él despreciamos a los demás. Y es que, el ego es lo que necesitamos alimentar justo cuando nuestra autoestima está baja. Las personas con mucho ego tienen un complejo de superioridad basado precisamente en su sentimiento de inferioridad. Curiosamente la filosofía Buda ha establecido una serie de premisas sobre qué deberíamos hacer en nuestra vida para desprendernos de él. Así que precisamente de ello es de lo que vamos a hablar en las siguientes líneas. Sigue leyendo y descubre los mejores consejos budistas para vencer el ego y superar esa sensación de sobrevaloración propia.
Cómo eliminar el ego según la filosofía budista
A continuación vamos a descubrir qué debemos hacer para eliminar el ego haciendo caso de la filosofía budista para que esa opinión que los demás tienen de nosotros deje de importarnos tanto. Si lo conseguimos podremos terminar con esa falsa ilusión de nuestro yo.
1. No te obsesiones con ganar
El primer consejo budista para vencer el ego está relacionado con la victoria: en la vida hay personas que no saben perder y las hay que tampoco saben ganar. El ego hace que nos obsesionemos con ganar, en cualquier cosa y a cualquier competición. Y eso al final, con la comparación se vuelve en un problema de autoestima. Si no ganamos nos consideramos menos, como si fuéramos peores y no nos permitimos ni una derrota. La verdad es que no podemos ganar en todo, cada uno tiene sus puntos fuertes y conocerlos te ayudará a no tener la necesidad imperiosa de resultar siempre ganador. Si un día pierdes, incluso en tu especialidad, si no das la talla no te obsesiones. Puede que no tuvieras un mal día, pero al día siguiente puedes seguir intentándolo y creciendo. Frustrarnos por no ganar solo nos llevará a desesperarnos, sentirnos mal y rendir peor para la próxima vez. Por eso, los budistas en sus claves para dominar el ego nos hacen ver que aprender de los errores y aceptar que a veces se pierde es la única forma de crecer.
2. Deja de ofenderte
La segunda regla de oro budista para desprenderse del egocentrismo está relacionada con la culpabilidad. Echar la culpa a los demás de nuestro malestar es algo que no nos beneficia en nada. Hemos de entender que cada uno de nosotros es responsable de sus emociones, y solamente podemos ofendernos con un comentario o una acción de alguien si nosotros dejamos que nos ofenda. Y es que, sentirse ofendidos, lo único que hace es debilitarnos. Lo mejor para evitar el ego según los budistas es considerar que esas actitudes por las que nos ofendemos a la misma son todo aquello que no necesitamos para sentirnos mejor. Es normal que algo te ofenda alguna vez, pero si estás seguro de ti mismo, no tienes por qué hacer caso a las cosas de los demás. Al fin y al cabo, no podemos controlar lo que hacen los demás, solo lo que hacemos nosotros.
3. No quieras tener siempre razón
A veces las opiniones personales se convierten en una batalla campal, en la que la persona que necesita alimentar su ego, combate a muerte por su victoria. El caso es que a veces no hay una única verdad y que respetar las opiniones de los demás es la única forma de debatir de una forma sana. Si nos empeñamos en tener razón, convertimos un debate en un circo absurdo. La necesidad de tener razón hace que se terminen relaciones maravillosas, que amigos se enfaden y que parejas se rompan. Solo cuando nos libramos de la necesidad de tener razón podemos despedir a nuestro ego, librarnos de él y sentirnos más felices con una vida más plena.
4. Tener más no es ser más
Hay ciertas personas que relacionan lo que son con lo que tienen. Lo peor de todo es que, cuando empiezan a acaparar riquezas nunca tienen suficiente, siempre quieren ser más y nunca se sienten satisfechos con su persona, ya que siempre se puede ser más rico de lo que son. El caso es que, la necesidad de tener más nos esclaviza, y nos lleva a sentirnos frustrados y a despreciar a los que tienen menos. Si algo hemos aprendido de los budistas es que no es más rico el que más tiene. Así que deshacerte de la necesidad de tener más y más es la clave para vencer el ego según los budistas, así que no lo pienses más.
Fuentes consultadas:
- Harvey, P. (2006). El budismo (Vol. 16). Ediciones Akal.