Como ya sabrás, el alma es el reflejo de nuestro espíritu, es nuestra esencia personal. Y como tal hay que alimentar el alma para que crezca, para que sea un alma sana, ya que de lo contrario tendrás un alma débil, aparecerán, la tristeza, la depresión, los dolores y así sucesivamente.
El proceso para alimentar y nutrir tu alma en 3 tips
Por mucho que intentes disimularlo, lo que sientas por dentro es lo que exteriorizarás, la imagen que los otros se llevarán de ti, así que lo mejor que puedes hacer es alimentar tu alma para alcanzar ese bienestar físico y mental así que vamos a descubrir cómo alimentar el alma en las siguientes líneas.
Haz lo que te gusta (y disfrútalo)
El alma del ser humano es lo que más todos debemos cuidar, y, si precisamente hay algo que nos ayuda a atraer energías positivas eso es hacer lo que nos gusta. Por eso, hacer lo que nos gusta nos ayudará a alimentar el alma y a alcanzar nuestra felicidad poco a poco. Aquí el abanico de opciones es muy grande, empezando por esas actividades que tanto nos gustaban en el pasado pero que, por una u otra razón, hemos dejado de hacer, desde escuchar música o tocar un instrumento, leer, aprender cosas nuevas, practicar algún deporte... La realización de actividades que nos gusten y nos hagan disfrutar es imprescindible para el equilibrio entre cuerpo, mente, espíritu y alma. Por eso, ya que hacemos algo que nos gusta vamos a disfrutar de ello.
No podemos tener remordimientos por haber dedicado un rato de nuestra vida a nosotros, una de las claves del cultivo del alma es no depender del resto ni actuar para cumplir con sus expectativas, sino con las nuestras. Esto nos lleva a otro de los puntos clave a la hora de alimentar el alma, huir de las informaciones y comentarios negativos que puedas oír o que puedan hacerte, que no harán más que perjudicarte e impedir que tu alma se alimente.
¿De dónde vienen las emociones y reacciones negativas?
Pues sí, pensar en positivo nos ayudará a alimentar nuestra alma, y para ello es necesario saber de dónde salen las emociones negativas que todos tenemos de vez en cuando. Solo si sabes su origen podrás dejarlas atrás y generar ese sentimiento de amor y perdón que transmitir a quienes te rodean. Este conocimiento del problema te ayudará a vivir en armonía contigo y con tu entorno, de forma que será más fácil lograr ese equilibrio del que antes hablábamos y seguir repartiendo amor.
Otra de las cosas que deberías hacer para cumplir ese objetivo es valorar bien tus palabras antes de dar oponiones, en especial cuando pueden herir a alguien. Todas tus palabras tienen unas energías, positivas o negativas, pero las tienen. Una crítica constructiva ayudará a la otra persona mucho más que una crítica destructiva, y a ti te hará sentir mucho mejor ver que estás ayudando a alguien. De esta forma estarás alimentando tu alma, y seguro que te sientes mucho mejor contigo y con los que te rodean.
Aprende a perdonar
Ya hemos hablado por encima del perdón, otra de las claves para alimentar el alma, pero es algo que tenemos que cultivar muy seriamente. El perdón es algo que aparece en libros religiosos, pero también en otras muchas referencias y nos ayudará a alimentar el alma de la mejor manera. Además, si deseas sanar tu alma para liberar del dolor y si quieres un alma limpia, pura y fuerte no hay sitio para resentimientos, amargura ni malas sensaciones con nadie ni con nada, y este perdón es algo que también debes aplicarte a ti mismo cuando cometas un error y descubras tu fallo.
Por último, debes saber que cuestiones como la meditación o, en el caso de las personas con profundas convicciones religiosas, el rezo y la oración nos pueden ayudar a alimentar el alma. Los caminos para ello son muchos, así que está en tu mano dar el paso adelante necesario para ello y empezar a alimentar tu alma para alcanzar el bienestar físico y espiritual que tanto anhelamos.