Por desgracia, quedarse sin trabajo es algo más habitual de lo que quisiéramos hoy en día, y la situación empeora si hablamos de familias enteras o de situaciones más complicadas. El caso es que, sea como sea, perder el trabajo puede llevarnos a un estado de inactividad que nos provoca un fuerte dolor emocional y nos hace sentirnos de lo más culpables. Por eso, es importante que tengamos algunas pautas en cuenta, para no caer en una estado depresivo cuando nos quedamos sin trabajo.
Los 3 consejos básicos para afrontar el desempleo
Quedarse sin trabajo es una de las cuestiones más serias que pueden suceder en nuestra vida, y además de ello, puede convertirse en una situación compleja a nivel personal, ya que, según datos de la la Asociación Española de Especialistas en Medicina del Trabajo (AEEMT), podemos ver cómo este estado de paro laboral puede provocar desde problemas digestivos o respiratorios hasta hipertensión. Por eso, si te encuentras en esta situación es fundamental saber que no estás solo, que hay muchas personas que pueden estar en nuestras mismas circunstancias y que hay algo que podemos hacer para enfrentarnos a una pérdida de trabajo y superar este obstáculo.
1. La importancia de mantenerse activo
Uno de los principales problemas que vienen acompañados de un despido o de una situación de desempleo son las dificultades en el estado de ánimo, por eso, te aconsejamos que para huir de esa sensación de ansiedad o de estrés dediques tiempo para hacer cosas que te gustan. Y es que, el mantenerte activo te ayudará a sentirte mejor y a tener mayor paz mental.
Para empezar, hacer un poco de deporte es recomendable para todos. Además, otras prácticas para la meditación tienen beneficios increíbles para nosotros, especialmente porque nos aportan tranquilidad, paz y nos permiten visualizar nuestras circunstancias.
Además, cuando la pérdida de trabajo nos llega en una edad adulta y buscamos trabajo, tener la mente ocupada y en otras cuestiones es muy importante, ya que así podremos focalizar nuestra atención en un punto, e indirectamente, conseguiremos una mayor fortaleza emocional y nos encontraremos mucho mejor.
2. Aprovecha para reciclarte
Hoy en día la vida va más deprisa que nunca y los avances tecnológicos son un continuo en nuestro día a día. El caso es que, un alto en el camino, aunque sea forzado, no está mal para encontrar nuevas técnicas y cursos de formación que den a tu curriculum un toque de frescura o un plus que te aporte mayor ventaja. Otra de las cosas que puedes hacer es aprovechar para estudiar un idioma, que siempre será un plus en tu búsqueda de empleo. Y es que, podemos tomarnos esta como una oportunidad de aprender cosas nuevas y de dedicar tiempo a ciertas actividades que antes nos parecían imposibles por no poderlo compaginar con nuestro trabajo.
3. Cultiva tus relaciones
Ya hemos hablado de la importancia de sentirse activo, nada mejor que mantener unas relaciones sociales activas, ya que en este momento puede darte una buena carga de energías positivas que te haga sentirte más animado/a. Amigos, familiares, conocidos siempre procuraremos cuidar nuestras relaciones sociales y rodearnos de personas que en cualquier momento de nuestra vida nos ayuden a sumar, gente positiva que te recuerde que debes creer en ti porque sino nadie lo hará. Son esas amistades sanas que siempre están a nuestro lado, y en este caso, más.
Fuentes consultadas:
- Jahoda, M. (1987). Empleo y desempleo: un análisis socio-psicológico. Ediciones Morata.
Otras fuentes consultadas:
- Fundación Adecco. Superar la depresión desempleo.