¿Eres una persona que cree en sí mismo y en sus capacidades? ¿Cuándo tienes un objetivo luchas hasta el final o desistes rápidamente? La autoeficacia es clave en estas cuestiones. Hay personas que creen en sí mismos y nunca se rinden y otras que se agobian y se desmotivan a la primera de cambio. ¿De qué tipo eres tú? El hecho de no confiar en nuestras propias habilidades puede hacer que nos desesperemos muy pronto ante los retos que nos pone la vida. Albert Bandura, en la teoría de la autoeficacia habla de estas cosas y de cómo este concepto influye en nuestra vida. Por todo ello, cuando hablamos de autoeficacia tenemos que hablar de premisas tan básicas como la autoestima o el desarrollo personal en la medida que logramos lo que nos proponemos.
¿Qué es la teoría de la autoeficacia?
Albert Bandura se refiere a la autoeficacia como la creencia de una persona en sus propias habilidades. Al hablar de este concepto nos hace partícipes de la importancia que tiene el mismo en nuestras vidas y en la consecución de nuestros objetivos y en definitiva de la motivación.
Por ejemplo, imaginemos que una persona, comienza una tarea como preparar un examen. Puede que durante el camino sienta que no tiene capacidad y lo deje, o puede que por muy difícil que sea quiera luchar hasta el final. Así, dos personas con la misma capacidad pueden obtener muy diferentes resultados, dependiendo de su autoeficacia. En este sentido, Bandura defiende que las creencias de autoeficacia de cada uno y la autorregulación para poner en marcha la conducta hacia los objetivos, será decisiva para los éxitos o los fracasos en la vida.
La autoeficacia influye no solo a nivel motivacional, sino que también es fundamental a nivel cognitivo y también afectivo. Por eso, las personas con alta autoeficacia y con pensamientos positivos sobre ellas mismas, son más capaces de realizar una conducta con éxito, además de padecer menos estrés o ansiedad.
¿Cómo desarrollo la autoeficacia?
Si bien es cierto que la autoeficacia se va desarrollando desde niños y comienza bien pronto a crearse este concepto sobre nuestras propias habilidades en la mente, también es verdad que, como todo en esta vida, con esfuerzo se puede modificar. Puede que sientas que necesitas más motivación de tipo intrínseca en tu vida, que te tu autoestima sea baja, te agobias enseguida y dejas los proyectos, a pesar de disponer de la capacidad para realizarlos. Puede que tengas que trabajar la autoeficacia.
Si quieres saber cómo puedes mejorar tu autoeficacia y dirigirte a una vida de mayores éxitos, te damos algunas pautas para que puedas comenzar a tener una autoeficacia alta. Recuerda que nunca es tarde para conseguir lo que queremos, fomentar el amor propio y sentirnos mejor con nosotros mismos.
Tómate un rato para hacer listas sobre ti mismo
Hacer listas puede ser muy importante para potenciar la autoeficacia. Tomar un lápiz y un papel y plasmar tus logros en ella puede ser de gran utilidad. Y es que, a veces tenemos una visión demasiado negativa de nosotros mismos, pero si nos paramos a pensar, podemos ver cómo hemos logrado más cosas de las que creemos. Del mismo modo, podemos hacer una lista de nuestras habilidades. Al ver escritas todas estas cosas se hacen más creíbles y confiarás más en ti mismo. Además, pararte a pensarlo también te irá muy bien para potenciar la autoeficacia.
Deja atrás los pensamientos infundados
En ocasiones, tenemos una concepción de nosotros mismos que está poco ajustada a la realidad y que, encima, hace que nos sintamos mal. Pensamientos del tipo “no sirvo para nada” o “mis fallos son inadmisibles” son evidentemente erróneos, pero aún así nos los repetimos y nos sentimos fatal.
Te recomendamos que reflexiones acerca de estas cosas que te dices a ti mismo y que no son ciertas. Piensa acerca de la rotundidad de las afirmaciones y hazlas tambalear. Eliminar estas creencias de tu vida te ayudará potencias tu autoeficacia.