Sentirse perdido en la vida es casi tan habitual como respirar, y es que, estamos expuestos a numerosos retos, algunos que elegimos nosotros y otros que nos vienen dados casi de nacimiento. Vamos tan rápido que apenas tenemos tiempo en distinguir unos de otros, solo tenemos que funcionar, producir, y trabajar para sentirnos realizados. Pero lo cierto es que, solo un proyecto de vida personal conseguirá darte esa sensación de realización que tanto buscas. Si estás en pleno camino de tu desarrollo personal te aconsejamos que sigas leyendo para descubrir lo que eres y lo que quieres llegar a ser.
Qué es un proyecto de vida personal
Antes de ponerte manos a la obra con tu proyecto de vida, lo primero que debes saber es algo muy básico pero que a veces se nos pasa por alto: saber bien qué es un proyecto de vida. Hemos de tener en cuenta que hoy en día, se nos mandan miles de mensajes que hacen pensar que sabemos lo que queremos. La televisión, las redes sociales, incluso el sistema establecido en nuestra cultura, nos hacen ver que todos queremos ciertas cosas que igual no queremos. Por eso, pararse a pensar en qué es lo que deseamos y por qué, puede ser enormemente beneficioso.
Esto es precisamente el significado del proyecto de vida personal y la clave para que pueda resultar exitoso. Se trata de pensar en qué es lo que queremos, y trazar un esquema para conseguirlo. Pero no solo se trata de planificar nuestras metas y objetivos e ir a por ellos, sino de meditar acerca de por qué queremos tal cosa y cómo va a afectar en nuestras vida. Y es que, pensando en cómo conseguir nuestro proyecto de vida personal también podemos ver que igual no es lo que queremos.
Objetivos del proyecto de vida
Al hacer un proyecto de vida hay un objetivo principal que supera a todos los demás. No es el de conseguir fama, éxito o dinero, ni mucho menos. El objetivo de hacer un proyecto de vida radica en conseguir exactamente aquello que deseamos, perseguir los sueños que tenemos, sin importar cuál sea el tipo de meta.
Si bien es cierto que pensamos en el éxito profesional o económico, lo cierto es que, se nos viene a la cabeza más por un tema cultural que por nosotros mismos. Del mismo modo, podemos pensar que queremos casarnos y tener hijos, y seguro muchos lo queremos, pero otros tantos puede que simplemente no se hayan parado a pensarlo. Por eso, al hacer un proyecto de vida, no solo estamos trazando las líneas para conseguir aquello que queremos, sino que también estamos descubriendo lo importante que es creer en nosotros mismos y qué es lo que queremos exactamente para nuestra vida.
3 consejos para tener tu proyecto de vida personal
Hacer un proyecto de vida no es sencillo, no basta con pensarlo unos minutos, sino que hay que hacerse una serie de preguntas que, al contestarlas debidamente, tendremos la primera aproximación a nuestro proyecto. Toma nota de estos consejos para trazar tu proyecto de vida personal y comienza a apostar por ti.
1. Piensa en qué te haría feliz
El primer paso para desarrollar tu proyecto de vida personal es que hagas una reflexión acerca de lo que te aporta felicidad, que te centres en lo que te hace sentir bien. Lo mejor es que tomes más de diez minutos en pensar esto, no se trata de lo primero que te venga a la cabeza, sino de una meta que realmente deseas.
2. Qué te gustaría que pasara dentro de 10 años
Cualquier modelo de proyecto de vida debe contemplar esta cuestión. A pesar de ser una pregunta típica puede ayudarnos a saber qué es lo que deseamos para nuestro futuro. Vislumbrándonos a nosotros mismos años atrás, dejamos atrás todo lo que hay en nuestra vida ahora, y nos encontramos cómodos, pensando en qué queremos para nuestro futuro. Además, esta reflexión te ayudará a avanzar en tu proceso de autonocimiento y es vital para trazar tu esquema.
3. Piensa si eso en verdad te hará feliz
Olvídate de lo que espera la gente de ti, y espera tú solo de ti mismo. Ten en cuenta que solo se vive una vez, y que es mejor vivir para ser feliz tú que para hacer feliz a los demás. Solo pensando en ti primero, conseguirás que tu proyecto de vida sea un auténtico éxito, porque cuando nos olvidamos de nosotros mismos, perdemos hasta nuestra esencia.