Cuando hablamos de adicciones seguramente nos viene a la mente cosas como las drogas, el alcohol o el juego. A pesar de que son algunas de las adicciones más relevantes, lo cierto es que existen muchas más conductas adictivas, y todas presentan características similares. Además, las adicciones están respaldadas de una carga emocional bastante fuerte. Por eso, saber más acerca de las adicciones nos ayudará a superarlas o a ayudar a otros a hacerlo.
Por adicción entendemos una forma de comportarse que no puede dejarse de repetir a pesar de sus consecuencias negativas. Estas consecuencias pueden ir desde un empeoramiento de la salud del adicto, hasta una lacra en las relaciones con los demás. Y es que, ser adicto puede destrozar la vida de una persona. La persona comienza a realizarlo porque supone un placer a corto plazo, y en muchas ocasiones es una vía de escape de una realidad que se considera complicada. Es una conducta que no se puede evitar, pese a que se intente varias veces.
Los síntomas de las adicciones
Cuando hablamos de adicción, deberemos tener en cuenta que no todas las personas que consumen alcohol son adictos ni todos los que juegan son ludópatas. Para que se dé esta situación, estos son los síntomas que indican la presencia de una adiccción en los que más podemos fijarnos.
- Impacto en la vida del adicto. Una persona con adicciones sufre un deterioro en su vida que es del todo visible. No solo empeora su salud, sino que además, esas conductas hace que empeoren sus relaciones sociales. Y es que, un adicto siempre antepone su adicción a cualquiera. Puede que pierda su trabajo, su familia, sus amistades...
- Fallo de autocontrol. La falta de control es un síntoma muy importante del adicto. Cuando este realiza la conducta adictiva, no tiene conciencia ni del tiempo ni de la energía que ocupa en tal adicción. No controla, y no es consciente de las consecuencias negativas que le va a acarrear.
- Memoria eufórica. No es ningún secreto que toda nuestra memoria es selectiva, pues no podemos recordarlo todo, pero en el caso de los adictos se hace más evidente. Tanto es así, que el adicto solo recuerda momentos de placer asociados al objeto de su adicción y no recuerda nada negativo de tal acto. Por eso, las recaídas son tan frecuentes, ya que todos los recuerdos son buenos.
- La negación. Se trata de un síntoma que puede relacionarse más bien como una fase. Una persona que está enganchada a algo comienza por negar que tiene esa adicción, y es que, llega a convencerse a sí mismo de que no supone un problema, para así, poder seguir haciéndolo. Y es que, si no hay problema no hay razón para abandonar.
- Conducta de búsqueda. Se refiere a que el individuo busca situaciones que le lleven a consumir, o realizar cualesquiera de los actos que tengan que ver con su adicción. Se trata de algo evidente, pero que la persona hace de forma inconsciente. Busca sin darse cuenta que está buscando.
Cómo tratar una adicción de forma efectiva
Reconocer que se tiene un problema es el primer paso para solucionar las cosas, y aunque superar una adicción no es ninguna tontería, hacerlo es posible y existen programas y tratamientos psicológicos y médicos que resultan muy efectivos.
Una vez la persona se hace consciente de que tiene un problema todo se vuelve más sencillo. Será necesario mucho esfuerzo para superar la adicción, por eso, la persona en cuestión tiene que estar convencida. Si cree que no tiene un problema, nunca lo podrá superar.
Los tratamiento psicológicos y los grupos de autoayuda serán fundamentales para que el tratamiento se supere con éxito. Conocer a gente que está pasando lo mismo que tú, te dará fuerzas para poder hacerle frente. Además, un profesional que te guíe y te indique las pautas a seguir puede ser de gran ayuda.