Quien más y quien menos se preocupa por su propia salud. Vamos al médico si algo nos duele, observamos si tenemos algún síntoma raro o pedimos medicamentos para encontrarnos algo mejor. Sin embargo, nuestro bienestar también depende de nuestra salud emocional, y encontrar el equilibrio emocional en este sentido es igual de importante. Y es que las emociones son el motor que nos mueve día a día. Son lo que marca nuestro rumbo.
Todas estas circunstancias son las que pueden afectar a nuestro equilibrio emocional. Conocernos más a nosotros mismos, conocer las emociones positivas y las emociones negativas que nos caracterizan en cada momento serán los aspectos clave para alcanzar ese equilibrio que mejorará nuestro bienestar.
Trabaja tu equilibrio emocional con estos consejos
Pero gestionar nuestras emociones y nuestros deseos no es algo sencillo. Es algo que debemos trabajar día a día para conseguir esa inteligencia emocional que nos dará la calma para vivir en paz. A continuación te ofrecemos algunos consejos para dar con tu equilibrio emocional así que ¡toma nota!
1. Pasa tiempo contigo mismo
Tenemos la falsa creencia que para alcanzar la felicidad y estar en calma debemos ser lo más productivos posible. Es por eso que cada vez tenemos menos tiempo para nosotros mismos y esto es uno de los errores más graves que cometemos cuando queremos trabajar sobre nuestro equilibrio emocional.
Aunque pienses que no tienes tiempo, seguramente puedes guardar un rato al día para pasar contigo mismo y tus pensamientos. En este tiempo puedes meditar, pensar o relajarte. Puede que ahora lo veas como una pérdida de tiempo, pero te sorprenderá como puede ayudarte a conectar con tu yo interior y a conseguir todos tus objetivos y a hacerlo con una mayor paz y sin menos estrés. Además, prácticas como el yoga pueden ayudarte a reducir tu ansiedad, e incluso el estrés, lo que te ayudará a ser más productivo y en definitiva, a tener mucho más tiempo para todas las tareas de tu día.
2. Elige relaciones sanas
Esta es la regla de oro para conseguir nuestro equilibrio emocional y esto no es otra cosa que la gente que nos rodea. Hay personas o tipos de relaciones establecidas que harán que tu actitud se venga abajo y tu motivación se desmorone. Observa tus relaciones y corta hilos con aquellas personas tóxicas que te hagan sentir mal o te frenen en tus planes. Las relaciones nos afectan enormemente y por eso, es importante elegir a aquellas personas que nos valoren y que quieran cuidarnos y compartir tiempo con nosotros. Ese tipo de personas que se preocupan por nosotros y se alegran de nuestros éxitos.
3. Practica una vida sana
Puede ser nuestro gran aliado o nuestro peor error para conseguir ese equilibrio de las emociones. Por ejemplo, los trabajos de oficina y la falta de tiempo nos han convertido en una sociedad sedentaria. Pasamos el día frente al ordenador y encargamos algo de comida basura para no tener que cocinar. Así pasamos los días, y nuestro cuerpo, por supuesto, se resiente.
Practicar ejercicio físico no trata solo sobre tener mejor aspecto físico. Se trata de modos de vida saludable que afectan tanto a nuestra mente como a nuestro cuerpo. Por otra parte, los excesos en alcohol u otro tipo de estupefacientes también pueden jugarte una mala pasada, por lo que te recomendamos que no te sobrepases con estas sustancias si deseas mantener un buen equilibrio emocional y tener buenas condiciones de salud.
4. Mira tus problemas desde arriba
Aceptar que la vida nos trae circunstancias devastadoras no es cosa de broma. En ocasiones, suceden cosas que no podemos controlar. No obstante, hay muchas que en las que sí podemos influir, y arreglar nuestros problemas requiere que los miremos desde arriba. Imaginemos que suspendemos un examen o nos echan del trabajo.
A pesar de que son circunstancias desagradables, dejarnos llevar por el malestar y rendirnos no nos ayudará en absoluto. En cambio, observar nuestros problemas y luchar por solucionarlos es una buena táctica que nos hará recuperar el control y el equilibrio en nuestras vidas.